En 2020, durante los meses más agudos de la pandemia, la industria automotriz tuvo que enfrentar el cierre obligatorio de plantas industriales, lo cual afectó duramente la producción de automóviles. A nivel mundial, se registró el nivel más bajo desde la crisis económica del 2008, mientras en México, entre abril y mayo, se produjo 10 veces menos que la cantidad habitual en esos meses.
En 2021, cuando la producción en el país comenzaba a normalizarse, la industria fue golpeada por el desabasto de semiconductores debido a la segunda ola de contagios en China, Malasia y otros países asiáticos que dominan la producción de este insumo.
Aumento en la demanda y oportunidades para las PyMEs
Por otro lado, la industria automotriz ha enfrentado un crecimiento en la demanda de vehículos debido a factores como el aumento en los viajes por carretera y el miedo a usar el transporte público. A pesar de esta encrucijada que combina alta demanda con obstáculos para la producción, el sector ofrece diversas oportunidades para las Empresas, por ejemplo:
Garantías
Es cada vez más común vender autos con garantías de terceros o de agencia. Empresas que ofrecen este tipo de coberturas están particularmente bien posicionadas para crecer en este momento dado que hay escasez de coches nuevos y muchos consumidores están teniendo que buscar alternativas seminuevas.
Servicios digitales
Las personas cada vez más pierden más el miedo a las compras en línea, y esto vale también para los coches. México tiene una de las plataformas en línea de compra y venta de autos más grandes del mundo y ha visto el crecimiento de otras varias. También hay demanda de servicios en línea de agentes especializados para resolver trámites como verificación, pago de multas, emisión de placas y tarjetas de circulación.
Conoce el panorama completo de la industria automotriz y las oportunidades que representa para las Empresas, en este estudio de Oxford Economics para Business Class.