Primer objetivo: ventas
Nuestra primera respuesta ante un escenario complicado debe ser enfocarnos en multiplicar nuestras ventas. Conseguir esto depende de identificar y resolver los problemas por los cuales nuestro plan original no está funcionando. Evidenciar para el público fortalezas de nuestro producto que no habíamos mostrado, así como diseñar ofertas y promociones, son acciones que pueden ayudar a incrementar nuestras ventas. Hay que tener en mente que en los tiempos difíciles es más necesario invertir en publicidad, ya que los clientes son los mejores aliados para recuperar la salud financiera de un negocio.
La solución más efectiva es la prevención, y hay que estar conscientes de que las circunstancias que favorecen un día a la empresa pueden no estar mañana. Por ello es muy importante trabajar en un plan B, partiendo de la premisa de que adaptarse a la nueva realidad es la clave. Lo primero es hacer un diagnóstico certero de qué ha cambiado para que la necesidad del cliente por nuestro producto o servicio haya disminuido, o para que ahora prefiera a la competencia. Una vez identificados los motivos, podemos buscar la manera de “re-enamorar” a nuestro público objetivo, aunque también puede que nos demos cuenta de que lo mejor es redirigir nuestra estrategia para ir en busca de un nuevo nicho de mercado.
Buscar inversiones
Aunque pueden ser difíciles de conseguir, las inyecciones de dinero bien planeadas sobre las áreas de la organización que no están funcionando adecuadamente nos pueden ayudar a devolverle la salud financiera. Si resulta pertinente de acuerdo al diagnóstico realizado, estas inversiones pueden ser utilizadas para abrir líneas de negocio distintas, migrar hacia nuevos mercados, buscar clientes distintos o recuperar a los que se han ido perdiendo.
Pensar antes de actuar
Una respuesta muy común ante momentos difíciles es recortar personal. Sin embargo, hay que tener en mente que el reemplazo de recursos humanos es muy costoso para una empresa, de modo que a veces vale la pena negociar salarios más bajos como medida de emergencia antes de recurrir a los despidos.
Ante las complicaciones en la salud financiera de una empresa, siempre será fundamental mantener la cabeza fría y no dejarse llevar por el miedo. Es importante que nos mantengamos firmes ante los miembros de nuestro equipo para que el clima laboral se vea afectado lo menos posible y ellos puedan seguir trabajando con la mayor calma posible.
Fuente:
https://www.gestion.org/
https://salvagallego.wordpress.com
https://www.merca20.com