Es un error pensar que la gestión del talento recae únicamente en el departamento de Recursos Humanos, pues es un área con las que muchas Pymes no cuentan y, sin embargo, pese a esa falta logran llevar una buena administración basada en dar prioridad a la gestión del talento. En todo caso, se recomienda democratizar las políticas de gestión del talento, lo cual implica incluir en cada paso que da la empresa a todo el organigrama, en vez de solamente la élite. Aunque la autonomía corresponde a los directivos y mandos intermedios, lograr el rendimiento y lealtad de los trabajadores implicará darles voz, así como proporcionarles soluciones y herramientas adecuadas que permitan aumentar su potencial y desempeño, su productividad y participación en las decisiones de la empresa.
Fideliza el reclutamiento humano en la empresa
Las políticas de gestión del talento consiguen fidelizar a los empleados y hacen que se comprometan con la misión de la organización , algo que se notará en el nivel de productividad. Incluso, la gestión del potencial humano contribuye a disminuir los índices de rotación de personal, al tiempo que garantiza la fidelización de las personas, ¿cómo? A través de:
1. Trabajo saludable y libre de negatividad
Fomentar las relaciones personales a través de actividades de integración de equipo, y siempre recurriendo al respeto entre compañeros de trabajo.
2. Retribuir de forma competitiva
Ajustarse a los salarios del mercado.
3. Mejorar la comunicación
El reclutamiento de personal , dar toda la información del puesto. E internamente, evitar malos entendidos y errores, con la finalidad de favorecer la confianza entre las personas.
4. Ayudar a cada trabajador a desarrollarse
Implica darles lo necesario para crecer y proyectarse dentro de su carrera profesional y vida personal.
5. Incentivar el talento
De acuerdo con sus habilidades y logros, además incluir el fomento de equidad de género, para abrir las mismas oportunidades a hombres y mujeres.
6. Apoyarse en la tecnología
La técnica empresarial cada vez está más a favor del desarrollo y gestión del talento. Existe un software capaz de medir el rendimiento de las personas, aportando y garantizando la objetividad en las decisiones a tomar. Pero hay que saber usar este tipo de herramientas, siempre dentro del marco estratégico para obtener buenos resultados. Otra fórmula consiste en optimizar los recursos y revisar los procesos corporativos para garantizar que los individuos con potencial cuenten con lo necesario para desarrollarse. Asimismo, habrá que apostar por la innovación, en vez de acomodarse con las opciones más tradicionales de administración. Otro punto importante es ser una empresa flexible, porque no todas las unidades de negocio de la organización tienen las mismas necesidades. El hecho de administrar el activo más importante de la empresa se hace más necesario al descubrir que lo que impulsa el éxito de la empresa son el talento y las habilidades de los trabajadores, que la gestión del talento previene la fuga del personal más capacitado, que concentrar esfuerzos en la atracción de perfiles competentes y el reclutamiento de personal son solo la mitad del camino, el otro 50% se compone de las políticas de retención y la gestión del potencial humano.
Fuente: “Cómo gestionar el talento en tu empresa”, WorkMeter.