Por otro lado, una encuesta del Banco de México sobre medios de pago utilizados durante la pandemia encontró que el efectivo era utilizado por 93% de la población antes de la contingencia, mientras que actualmente es utilizado por 86%. Otro hallazgo importante es que, antes de la pandemia, medios de pago como SPEI eran utilizados por menos del 1% de la gente en México, mientras que hoy son usados por 4%.
Esta tendencia crea la necesidad de que las PyMEs aceleren o comiencen la incorporación de pagos digitales a sus estrategias para tener mejores resultados, tanto en la nueva normalidad, como en la era post-COVID. A continuación, Business Class presenta algunos consejos que pueden ayudar a las Empresas en esta transición:
Informarse sobre los pagos digitales
Algunas PyMEs temen que volverse cashless signifique quitarle a sus clientes la opción de decidir cómo pagar. La preocupación es mayor entre los Negocios que manejan transacciones pequeñas o que atienden a personas mayores o de bajos ingresos, pues el uso de efectivo es más frecuente en estos escenarios. Otro factor que impide la digitalización de medios de pago son las tarifas y comisiones que cobran los bancos y Fintechs.
Sin embargo, las opciones distintas al efectivo también tienen ventajas que, en última instancia, pueden traducirse en ahorros y mayores ingresos: los sistemas de pago electrónicos permiten realizar transacciones de manera casi instantánea y desde cualquier dispositivo móvil o computadora con acceso a internet. Además, agregan una capa de seguridad a todo el proceso, ya que no es necesario cargar con efectivo para depositarlo en un banco y se disminuye el riesgo de que alguien haga un uso indebido de recursos de la Empresa o cometa errores de cálculo.
Ampliar las opciones de pago que ofrece un Negocio también puede servir para atraer nueva clientela que prefiera pagos cashless, y para retener a la que ya se tiene al mejorar su experiencia de compra.
Investigar y evaluar las distintas opciones es el primer paso para que las PyMEs integren los pagos digitales a sus canales de venta. Para obtener esta información, es recomendable consultar con otros Negocios que ya hayan dado el paso, así como examinar detenidamente la oferta de distintas instituciones bancarias y Fintechs.
Comprender el potencial de las soluciones digitales de pago
Para beneficiarse al máximo de la digitalización, las empresarias y empresarios deben comprender todo su potencial. Por ejemplo, muchas soluciones de este tipo se integran directamente con los libros de la Empresa para crear informes de conciliación y seguimiento que facilitan la gestión financiera. Además, la implementación de estos métodos digitales suele ser sencilla y automatizada, de modo que las Empresas pueden hacerlo ellas mismas y prácticamente no requieren intervención de terceros, ni un trabajo de adaptación especial.
Implementar sistemas digitales robustos
Un punto fundamental a tener en cuenta es la organización. Por ejemplo, si una Empresa acepta transacciones interbancarias, debe asegurarse de que cada pago tenga un número de referencia que permita conectarlo con el cliente. También es importante hacer un seguimiento constante de las finanzas de la Empresa a lo largo del año: hay que estar revisando periódicamente el flujo de efectivo y los estados de cuenta, y no sólo hacerlo durante el cierre contable. Esto permitirá detectar a tiempo cualquier irregularidad. Como ya se mencionó, la digitalización hace más sencillo llevar a cabo este seguimiento.
Utilizar pagos digitales como complemento
Aunque se debe hacer conciencia de que los pagos digitales se convierten cada vez más en una realidad, implementarlos no significa que los pequeños Negocios tengan que abandonar los cobros en efectivo inmediatamente. Lo importante es formular y echar a andar una estrategia de digitalización que permita a las PyMEs no quedarse atrás y seguir siendo competitivas.
FUENTES: