LA PUESTA EN MARCHA DE UN NEGOCIO EN 5 CLAVES FINANCIERAS

No hay porqué saberlo todo. Ésa es una de las frases que sobrevuela siempre a un emprendedor cuando se lanza a poner en marcha un nuevo negocio, y una máxima a tomar en consideración. Porque es cierto, nadie es capaz de abarcarlo todo. Menos aun cuando se trata de emprender. Por eso, siempre es necesario tener ayudas.

“Centrarse en los clientes y en sus necesidades; no perder de vista el objetivo final; recordar que la caja manda; tener en cuenta la importancia del equipo; y la cultura”, enumera Javier Megías, inversor y cofundador de StartupXplore, como los cinco puntos clave a la hora de poner en marcha una empresa. Pero, aunque son indispensables y a todos hay que darle la importancia que merecen, a la mayoría de los emprendedores se le atraganta el aspecto financiero.

Los 5 mandamientos financieros

Una nueva empresa puede nacer como un negocio rentable o como una idea que alcanzará la rentabilidad con la escala en unos años. Sea como fuere, “siempre hay que establecer una serie de líneas rojas, gestionar la caja con sentido común y ser sensato con las previsiones”, aconseja Megías. Y es que seguramente “los ingresos van a ser la mitad de lo que se estima en un primer momento y los gastos el doble de lo que se tenía pensado”, advierte Tomás Santoro, fundador de Suma CRM.

Poner en marcha una nueva empresa cuesta en España alrededor de 5.000 euros, según un análisis de la firma de asesoramiento financiero, fiscal y legal para emprendedores Ad&Law, más de 12 días de espera y 7 procedimientos distintos, según la última edición del informe Doing Business elaborado por el Banco Mundial. Números que pueden echar para atrás a los emprendedores que no cuenten con asesoramiento o ayuda. Pero vayamos por partes y aclaremos cuáles son esos primeros pasos que uno debe tener en cuenta a la hora de emprender.

1. La notaría. Uno de los primeros pasos que un nuevo empresario debe dar en materia financiera es éste. De antemano, ha de saber que su montante varía en función del tipo de sociedad que se vaya a constituir y los impuestos derivados. Así, por ejemplo, por una Sociedad Limitada se debe desembolsar 3.000 euros a los que habrá que sumar entre 150 y 300 euros, según la notaría. Además, hay que añadir los gastos del Registro, que suele cobrar 200 euros por una provisión de fondos, y el coste del registro y su publicación que oscila entre los 100 y los 250 euros. Amén de legalizar los libros de contabilidad y de socios, y las actas, que costará otros 50 euros al año.

2. La marca. La tasa que hay que pagar por un registro de marca nacional son 150 euros, y si se registra a nivel europeo este coste asciende a unos 900 euros. Además, hay que tener en cuenta que cada 10 años hay que renovar el pago.

3. El local. No todas las empresas lo requieren, pero aquellas que lo necesiten deberán abonar los gastos del alquiler del establecimiento, más los gastos asociados. Si se adquiere el local, a la letra de la hipoteca hay que sumarle las tasas de residuos, el IBI, la comunidad…

4. Impuestos. Ponerse en marcha como autónomo está ligado, irremediablemente, a unos impuestos: Impuesto de Actividades Económicas (IAE), la tasa por licencia de actividad, el pago de autónomos… Y a todo es hay que sumarle, al trimestre, el IVA, las retenciones, el pago a Hacienda, los pagos a cuenta del impuesto de Sociedades…

5. Ayuda externa. No debería ser el último, sino el primero. Aun así, es importante saber que en todo este camino financiero es necesaria la ayuda. Los centros de innovación, los coworking, los HUB…
suelen contar con asesoramiento para emprendedores. Pero no son los únicos. También hay entidades que han lanzado productos que pueden ser útiles en los primeros momentos de vida de una empresa, e incluso en el mantenimiento de la organización. Y es que un buen empresario no es necesariamente un buen gestor. En este sentido existen cuentas como la Cuenta de Establecimiento de American Express, que pone a disposición una serie de herramientas para que sus usuarios puedan ahorrar tiempo y dinero simplificando la operativa diaria.

Poner en marcha un negocio es complicado, pero es más fácil de llevar gracias al entusiasmo que caracteriza los comienzos. Lo difícil es mantener en pie la empresa. Vigilar el flujo de caja, llevar un registro de los envíos realizados en el último año, los pagos pendientes, resolver reclamaciones, etcétera, son tareas propias del día a día que muchos empresarios son incapaces de ejecutar, y necesitan un apoyo que les permita dirigir la compañía sin preocuparse por temas organizativos y de gestión. American Express ofrece una herramienta excelente para tal fin. Con la Cuenta de Establecimiento se pueden solventar estas gestiones diarias y mantener la información actualizada, con la tranquilidad de saber que siempre va a tener un asesoramiento experto a sólo un clic de manera inmediata.